RABAT La joya escondida de Marruecos
RABAT
La joya escondida de Marruecos
Una sorpresa para el viajero
Qué Ver en Rabat
Os recomiendo que alquiléis Vélotaxi Rabat, son unos carritos tirados por bicis eléctricas, que hay por todo Rabat, es un paseo muy divertido en el cual casi sin esfuerzo, podréis hacer la visita guiada de casi todos los lugares mas importantes, en muy poco tiempo, os hacéis una idea de lo impresionante de la ciudad, después ya podéis visitar a pie más tranquilamente su medina y perderos en ella. Lo que nos encanta en todas las ciudades que visitamos es perdernos en las medinas, aunque creamos que son todas iguales, no lo son, cada medina tiene su historia y su encanto.
La Modernidad se Encuentra con la Tradición
Rabat es también un ejemplo de cómo la modernidad y la tradición pueden coexistir. En el barrio de Agdal, vimos cómo los cafés modernos y las tiendas de moda se mezclan con los edificios antiguos. Este contraste es particularmente evidente en la avenida Mohammed V, donde los tranvías modernos pasan frente a edificios de la época colonial francesa.
Visita Obligada
La Torre Hassan y el Mausoleo de Mohammed V
Hoy en día, la Torre Hassan es una atracción turística muy popular. Los visitantes pueden admirar la torre desde el exterior y pasear por los jardines circundantes. También es un lugar perfecto para aprender más sobre la historia de Rabat y la arquitectura almohade. En resumen, la Torre Hassan es un testimonio impresionante de la ambición y la habilidad arquitectónica de la dinastía almohade, y su visita es imprescindible para cualquiera que quiera entender la rica historia de Rabat y Marrueco. La mezcla de estilos y la tranquilidad del lugar te hacen sentir en otro mundo.
La Kasbah de los Udaya
Este barrio fortificado es una pasada. Sus callejuelas azules y blancas son perfectas para perderse y hacer fotos increíbles. Además, desde aquí tienes unas vistas alucinantes del río Bu Regreg y de la ciudad de Salé.
El Palacio Real
Aunque no se puede entrar, el Palacio Real es impresionante desde fuera. Los guardias con sus uniformes tradicionales y los jardines cuidados al detalle hacen que merezca la pena el paseo.
Las Murallas y Puertas de la Ciudad
Rabat está rodeada de murallas que te hacen sentir como en una película de época. La Puerta de Bab Oudaia y la Puerta de Bab Rouah son dos ejemplos que no te puedes perder.
El Antigua Medina de Rabat
La Necrópolis de Chellah
La necrópolis de Chellah es hoy el espejo de cómo vivían fenicios, cartagineses, romanos y árabes. Rodeada de murallas, aquí están las ruinas de la mezquita que levantó Abu Yusuf y de los edificios que la rodeaban. Detrás del mihrab se puede contemplar el santuario de Abu Yaqub Yusuf. Sin embargo, lo más destacable de este histórico espacio es el mausoleo de Abu al-Hassan, conocido también como “el sultán negro”, y el de su esposa, una cristiana que se convirtió al Islam y que fue la impulsora de la construcción de la madraza Bou Inania de la ciudad de Fez. Es interesante también descubrir lo que queda del arco del triunfo, el foro y las termas de la ciudad romana. De la época árabe, quedan vestigios del antiguo hamman y varios sepulcros y santuarios que otorgan un carácter mágico a este emplazamiento que hoy está habitado por numerosas cigüeñas.
La Hospitalidad Marroquí
No puedo hablar de Rabat sin mencionar la calidez de su gente. Desde el momento en que llegué, me sentí acogido por la hospitalidad marroquí. Los lugareños siempre están dispuestos a compartir historias sobre su ciudad y recomendar los mejores lugares para visitar y comer.
Conclusión
Rabat es una ciudad que invita a ser explorada, con su rica historia, su vibrante vida moderna y su impresionante belleza natural. Mi tiempo allí fue una experiencia inolvidable, llena de descubrimientos y encuentros significativos. Si buscas un destino que ofrezca algo más que lo habitual, Rabat debería estar en tu lista de lugares por visitar. Podemos ayudarte a vivirla a tu manera. consúltanos.